De "muros" y "lágrimas"



A Guillermo Cienfuegos Pérez, “Lagrimita”, ni quienes lo apoyaron para que fuera candidato independiente a Presidente Municipal de Guadalajara votaron por él en la Jornada Electoral del pasado 7 de junio de 2015; en tanto, José Pedro Kumamoto Aguilar, candidato independiente, con eslogan “derribar muros”, septuplicó sus apoyos y triunfó.
Los números hablan solos.
Cienfuego Pérez y Kumamoto Aguilar, con base en las nuevas normas electorales de 2014, solicitaron ante el Instituto Electoral y deParticipación Ciudadana de Jalisco (IEPCJ) su registro como candidatos a Presidente Municipal de Guadalajara y Diputado por el Distrito 10 local de Jalisco. El 4 de abril de 2015, víspera del arranque de campañas electorales, el órgano electoral local aprobó la candidatura de Kumamoto Aguilar y rechazó la de  Cienfuego Pérez.
El candidato a diputado local acreditó su registro con 6,485 firmas, cotejadas ante el Registro Federal Electoral (RFE) del InstitutoNacional Electoral (INE); es decir, con 1,008 firmas más de las requeridas por la norma (2 por ciento del Padrón Electoral del Distrito 10, con corte al mes de agosto de 2014).

“Lágrimas” de un “payaso” (entrecomillado, por respeto a los Payasos)
Cienfuegos Pérez, el “payaso” “Lagrimita”, sólo pudo acreditar 22,899 firmas de las 23, 887 que requería con base al 2 por ciento del Padrón Electoral del municipio de Guadalajara. Le faltaron 988 firmas a “Lagrimita”.
El IEPCJ desglosó mediante un concentrado las “irregularidades” en las 27,919 “firmas” que presentó para su registro. En estas había 1,465 registros duplicados; de las restantes, sólo 24,634 se encontraron en la base de datos del Padrón Electoral, pues 1,479 no existían y 341 habían sido dadas de baja de ese padrón (194 correspondían a personas que ya habían fallecido).
Luego, de entre las que sí estaban en el Padrón Electoral 769 eran de personas que no contaban con credencial, 151 eran de personas que radicaban en otra entidad federativa y 815 eran de otro municipio distinto a Guadalajara.
“Lagrimita” acudió a tribunales, llegando al federal, para que el sábado 30 de mayo, a cuatro días de concluirse la campaña, mediante un recurso de reconsideración, se le otorgara el registro como candidato argumentando el tribunal “equidad”, y provocando con ello la reimpresión de papelería electoral (como boletas), con un costo de dos millones y medio de pesos asumido por el IEPCJ.
Si tan sólo se divide el total de votos que “Lagrimita y Costel” obtuvieron sobre el costo de reimpresión de boletas, cada voto obtenido tuvo un costo de 586.30 pesos.
De esta forma, “Lagrimita” llegó a ser candidato independiente a la Presidencia Municipal de Guadalajara con su hijo, también “payaso”, Costel Antuán Cienfuegos Sifuentes, con el apoyo de 22,899 personas de la capital de Jalisco que apoyaban su candidatura.
El día de la Jornada Electoral, “Lagrimita y Costel”, padre e hijo que hacen pareja en sus shows, fueron ignorados por la mayoría de quienes los habrían apoyado en su candidatura: sólo obtuvo 4,264 votos en la elección; es decir, 18,635 personas con credencial para votar con fotografía que habían firmado su registro como candidatos, ciudadanos y ciudadanas, no votaron por ellos.
Si “Lagrimita y Costel” hubieran mantenido como votos a los firmantes de su candidatura, con base en los resultados preliminares de la elección para Guadalajara, habrían obtenido el 3.9 por ciento de la votación total; sin embargo, con los 4,264 obtenidos, se quedaron en el revelador 0.73 por ciento de los votos totales emitidos.

Cayó un muro
El caso de José Pedro Kumamoto Aguilar es el lado opuesto al de “Lagrimita”. Un joven de 25 años, recién egresado de la Licenciatura de Gestión Cultural y coordinador del Wikipolítica Nodo Jalisco, sin recursos materiales, pero sí con una red de jóvenes voluntarios y abierto a las aportaciones que no excedieran de 7 mil pesos por persona.
Kumamoto, con la consigna de “Los muros sí caen”, emprendió la búsqueda de su registro para candidato a diputado local por el distrito 10, con sede en el municipio de Zapopan, codiciado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) al ser emblemático y referencia de fuerza y presencia histórico-política del Partido Acción Nacional (PAN).
Kumamoto emprendió su lucha en el “corazón” de la clase política.
El IEPCJ le otorgó registro como candidato a diputado local, con Alejandro Pablo Torres Guízar como suplente, el mismo día que a “Lagrimita” le rechazó su registro, pero aprobó las candidaturas independientes de José Francisco Sánchez Peña, “Dr. Paco”, para Presidente Municipal de Puerto Vallarta; de Jesús Oswaldo Silva Magaña, para Presidente Municipal de Tuxpan y José Zepeda Contreras, para Presidente Municipal de Valle de Juárez.
Kumamoto Aguilar obtuvo su registro con 6,485 firmas y documentos de personas acreditados por el RFE del INE, 1,008 más de ese 2 por ciento de electores que marca la ley para el Distrito 10 en Zapopan (5,477).
Y el crecimiento se dio. El día de la jornada electoral superó al PRI, al PAN e incluso a Movimiento Ciudadano (MC) en esa demarcación. Obtuvo 51,478 sufragios de zapopanos, que sobre la votación total emitida representó el 37.73 por ciento, con base en el 94.61 por ciento de las casillas computadas en el Programa de Resultados Electorales Preliminares  (PREP).
Kumamoto Aguilar superó al PAN con 33,776 votos; al PRI-PVEM con 29,255 y a MC con 20,785.
Pero su crecimiento exponencial no fue sólo sobre los partidos políticos, sino sobre su misma basa de arranque: Kumamoto consiguió 44,993 apoyos-votos más sobre las firmas con que se registró como candidato; siete veces más.


Pedro Kumamoto

Lagrimita y Costel, padre e hijo


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